EL PAÍS DE LAS INCERTIDUMBRES
Mis queridos amigos y relacionados, otra vez con las baterías cargadas de deseos, hago transitar mis dedos por el teclado de mi ordenador para compartir mis reflexiones en esta hora menguada de Venezuela en la seguridad que lo que aquí digo llegará a las conciencias de sus destinatarios y tal vez hasta genere acciones de los que lean estos párrafos muy personales pero cargados de la verdad a la que asisto como un ciudadano venezolano por voluntaria adopción de la que no me arrepiento desde 1983 en que tomé esa decisión, en el ya largo exilio lejos de mi amada Cuba, que después de casi 60 años de sistema, régimen y gobierno totalitario castrocomunista impuesto por un mercader de ilusiones disfrazado de un Cristo redentor resultó ser un demonio disfrazado de oveja que ambicionaba dominar la A. Latina-Caribe (y casi lo consigue) poniendo sus garras en Venezuela, tierra de gracia pletórica de riquezas y con una historia cargada de héroes y hazañas por la libertad, la democracia y la justicia social, paradigma de la región, meca de los exiliados, refugiados y rebeldes de todas las latitudes que aquí encontraron puerto seguro.
Como diríamos en buen cubano recordando al inolvidable cantor popular Panchito Riset: “El cuartico está igualito”; yo agrego: Pero ahora estamos en un laberinto con el tema de las “propuestas elecciones” y los candidatos. ¿Que solo son comparsa? En un caso todos recordamos el papel doble del comandante Arias Cárdenas que resultó ser una víbora chavista para después hacerse con la gobernación del Edo Zulia, por lo aquí se dice: ”el picado de culebra cuando se encuentra un bejuco salta”. Ese es el caso del Sargento Técnico Henry Falcón ex chavista, ex gobernador del Edo Lara que perdió su reelección trente a una Almiranta de esas que han tenido todos los cargos del mundo en este gobierno. También aspiran a la presidencia (con minúscula) un pastor protestante y dos más que no los conocen ni en los centros espirituales. Frente al heredero del galáctico comandante eterno que aparece 10 veces en la boleta electoral que se usará en los “inaceptables comicios” según una gran cantidad de gobiernos democráticos que condenan el ejercicio del poder dictatorial de Maduro y sus facinerosos acólitos. Y mientras los aspirantes a la silla reventada de Miraflores realizan sus pobres campañas, el presidente aparece incluso en todas las redes sociales que existen, diez veces en el día en las mayoritarias TV propiedad del gobierno, la inmensa cantidad de prensa escrita que poseen o están sometidas, más las aberrantes y ridículas cadenas de radio y tv para decir insultos contra el imperialismo o la oligarquía criolla o los dirigentes exiliados o echando pestes de la llamada 4ta República y finalmente convertido en un vociferante gorila que como una rueda de la fortuna regala, regala y regala el dinero que no es suyo a los agraciados o desgraciados que deben ser portadores del carnet de la patria, hijos de la patria, madres de la patria, hogares de la patria que le acompañan en su campaña de mentiras, a la vez que promete, promete y sigue prometiendo el paraíso para después que salga electo otra vez el próximo 20 de mayo como si el no fuera el continuador de este llamado hambreador y miserable socialismo del siglo XXI , como si aquí no hubiera pasado nada (borrón y cuenta nueva), Vaya semejante desparpajo del que en cada acto termina bailando como un arlequín de guiñol junto a la “primera combatiente” del nepotismo elevado a la enésima potencia.
Mientras tanto el país se deshace en todos los aspectos, los enfermos siguen muriendo de mengua en los hospitales y si protestan los gremios de la salud, sindicatos, pacientes y familiares les echan los perros de presa y esbirros para disuadirlos de sus protestas como la pasada semana que los “colectivos” (tropas de choque armados) capitaneados nada menos que por el Jefe de Seguridad del Ministerio de Sanidad arremetieron con saña contra los protestantes y periodistas con secuestros, robo de equipos y golpizas en el Hospital Vargas, Decano de la docencia de medicina en Venezuela. Y qué decir de la falta de agua por días y semanas en pueblos y ciudades que ya cubren hasta la gran Caracas acompañada por las fallas de electricidad a cualquier hora del día o la noche, del destartalado sistema de transporte y sus precios estratosféricos en las piezas de repuesto, cauchos, baterías y piezas y que decir de las medicinas y servicios públicos inexistentes o a precios escandalosamente altos, del pan nuestro de cada día que una barrita ya no baja de cien mil bolívares fuertes. Fuertes dije, que ahora es polvo cósmico, que no hay billetes, que ya anunciaron un nuevo cono monetario que será una nueva curita para la hiperinflación que arrasa con nuestros ya magros bolsillos mientras el gobierno busca dinero de la banca privada por vía de la intervención como ya hicieron con el todavía poderoso Banesco, el más grande y moderno de Venezuela; y lo que falta, cuyo objetivo es apropiarse de las remesas a precio de gallina flaca para financiar el sumidero en que se ha convertido el estado corrupto y represor en el que el narcotráfico campea a su antojo; ¡ahh! pero los enchufados repiten machaconamente “tenemos patria”, a la que yo añado: A punto de colapsar. Nos separan solo unos días del 20 de mayo para unas elecciones convocadas a la carrera por el más espúreo aparato creado por el gobierno, la ANC avalada por el aún más falso TSJ nombrado entre gallos y medianoche, supremo cómplice del presidente bailón, incapaz y aburrido pero leal a los designios de la Habana a la que le mantiene una suculenta tajada de petróleo que nunca pagarán y que al siguiente día del cambio del viejo presidente cubano por el nuevo títere, aterrizo en Cuba junto al vocinglero Evo Morales para continuar la línea que en su momento orientó el barbudo mayor que ya no está. Y hablando del oro negro la otrora inconmensurable PDVESA va cuesta abajo en su rodada, con una producción venida a menos, quebrada perdiendo sus activos en virtud de las reclamaciones de la Conoco Philips que le ganaron en un arbitraje internacional y otras que tienen las balas en el directo apuntando a la renqueante petrolera, otrora una de las mayores del mundo que tenía en el pasado una nómina de 40,000 empleados y obreros y que la robolución la aumentó a 140,000 rojos rojitos, según el hoy defenestrado zar del petróleo, Rafael Ramírez premiado con la embajada en la ONU y ahora desaparecido del firmamento embarrado en la corrupción de la empresa hasta el cogote. Ahora ese estamento lo dirige un general, como en la mayoría de los ministerios, que ya suman más de 30 y ninguno da pie con bola, en nuestro argot popular; aunque se disfracen de civiles no pegan una porque “aunque se vista de seda la mona…… pero así son las cosas aquí en esta tierra de gracia por ahora.
Pero volvamos al tema de las elecciones que para los ciudadanos se ha convertido en una verdadera ratonera de votar o no votar; ningún candidato ofrece confianza y mucho menos dotes de estadista, la invisible MUD enclaustrada en su Palacio Federal al calor de la AN inoperante por mandato de la ANC refrendado por el TSJ el de la suprema injusticia, La ilusión de un Frente Amplio se quedó dando traspiés como un borracho sin poder enderezar su camino que es donde radica la verdadera fuerza de este país. Su sociedad civil, aun aletargada Los sindicalistas salvo algunas honrosas excepciones están en sus cuevas sin decir pío, los estudiantes en su mayoría andan en estampida para destinos sobre todo del sur, que les abren las puertas para captar talentos ya formados que no les costó un medio formar, llevando consigo el dolor de haber abonado con sangre las calles de Venezuela; para nada, y los profesionales marchan por el mismo camino con lo que ese inmenso capital humano se va buscando un mejor destino como hicieron en otros tiempos los miles y miles de inmigrantes que aquí encontraron abrigo. Esa sociedad embaucada, escarnecida, frustrada desesperanzada y otra vez dividida entre el votar o no votar se debate en este miserable laberinto donde el gobierno ha puesto todas las trampas posibles en esta cortísima convocatoria inhabilitando partidos y al liderazgo, obligando a muchos a exiliarse o meterlos en la cárcel, inventándoles delitos inexistentes o sembrándoles falsas pruebas apelando al más vil chantaje al pueblo, humillándolo con la dádiva y la limosna comprometida porque aquí nada se produce en este inmenso y rico territorio donde ni siquiera han podido restablecer las empresas básicas de Guayana que son un emporio de riquezas minerales. En esa puja por el poder ya la flamante y mentirosa presidenta de la ANC a boca de jarro dijo “nunca vamos a entregar el poder”, ¿ Qué tal?, se le fue o lo aseveró. Lo cierto es que tirios y troyanos se especializan en crear incertidumbre y no se le encuentra salida al laberinto.
No logro entender como notables políticos como Eduardo Fernández y Claudio Fermín junto al no menos calificado economista Francisco Rodríguez se han subido al carro de Henry Falcón con el sueño de que van a ganar estos comicios cuyo resultados están ya cantados. Sin embargo, ya 76 gobiernos democráticos han repetido que no reconocerán esta farsa de elecciones, OEA, Grupo de Lima, UE, los EE.UU España muchos otros en un clarísimo aviso de la soledad en que está el régimen donde no habrá observadores internacionales ni de la ONU al que el gobierno le ha llorado para que vengan y ha dicho un rotundo NO, porque no existen las condiciones requeridas para un proceso verdaderamente democrático, aquí solo vendrán la comparsa de los países amigos que le quedan a este gobierno ( léase Cuba, Bolivia, algunos comprometidos caribeños y Nicaragua si Ortega sobrevive a la candela que tiene dentro que puede llevárselo del escenario) Y finalmente menciono a nuestra Conferencia de Obispos Católicos y sus dignatarios que insisten y repiten todos los días que este proceso es una pantomima.
Pero el pueblo llano, trabajador, con un 87,0/00 de pobreza y 61,2/00 de pobreza extrema, bombardeado de promesas y de dinero que nada vale se debate en esa disyuntiva macabra, muchos tienen razón para votar por Maduro que ya les compró la vida, otros compraron el discurso abstencionista que no conduce a nada y otros creerán que la opción de Falcón los sacará de este desastre.
Yo no tengo dudas, me sobran razones y mucha experiencia de mi Cuba querida que perdí, por tanto no me abstengo, pero nunca votaré por un militar y mucho menos por un tirano rojo.
Pedro Pérez Castro
13 de mayo de 2018